Historia de las Fórmulas Lácteas HiPP

1968: Nace la fórmula láctea adaptada En HiPP, sabíamos que la composición de proteínas de la leche de vaca y la materna difería significativamente: en la de vaca, el 80% es caseína y el 20% es proteína de suero (whey), mientras que en la materna, la proporción es 40% caseína y 60% proteína de suero. Para emular mejor la leche materna, modificamos nuestra fórmula infantil, añadiendo más proteína de suero, en un primer paso crucial para hacer nuestros alimentos más tolerables para los bebés.

1992: Introducción de ácidos grasos LCP La leche materna contiene ácidos grasos específicamente creados para ser asimilados por el cuerpo humano, esenciales para el desarrollo del cerebro, las células nerviosas y la vista. Estos ácidos grasos omega-3 y 6, llamados ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga (LCP o LCP UFAs), se añadieron a nuestras fórmulas a partir de 1992, provenientes de aceites de huevo y pescado. Hoy en día, también utilizamos aceites vegetales especiales con un sabor más agradable. Los LCPs son esenciales para el desarrollo temprano, ya que el cuerpo no puede producirlos por sí mismo.

1998: Incorporación de probióticos La leche materna contiene una amplia variedad de cultivos probióticos, únicos y distintos. Durante la lactancia, estos probióticos se transmiten al bebé, se adhieren a la pared intestinal y evitan la proliferación de gérmenes no deseados, garantizando así una flora intestinal saludable y una fuerte defensa inmunológica. Desde 1998, nuestras fórmulas infantiles contienen probióticos, imitando este efecto protector de la leche materna.

2002: Adición de prebióticos La leche materna contiene grandes cantidades de prebióticos activos oligosacáridos, que promueven el crecimiento de probióticos. En HiPP, desde 2002, fuimos los primeros en utilizar cultivos naturales de bacterias de ácido láctico aisladas de la leche materna, para hacer nuestra leche aún más similar a la materna. Algunas marcas también utilizan fructo-oligosacáridos (FOS) aislados de las plantas de achicoria.

2011: Probióticos y Prebióticos La leche materna contiene una combinación perfecta de probióticos y prebióticos que se apoyan mutuamente para proteger el sistema inmunológico. Tras años de investigación, desde 2010 fuimos pioneros en lanzar una nueva generación de fórmulas lácteas que contienen una combinación de probióticos y prebióticos. Así, a partir de marzo de 2011, todas nuestras fórmulas infantiles orgánicas HiPP COMBIOTIC® cuentan con esta combinación, ofreciendo una amplia gama de fórmulas para tu bebé con cultivos naturales de ácido láctico y fibras dietéticas prebióticas para los bebés que no son amamantados.